¿Estás preparado para el juicio más impactante del mundo del cómic?
Alan Moore (Promethea, V de Vendetta, La cosa del Pantano, Tom Strong, Supreme), escribió y publicó en 1997 una de sus tramas más interesantes dentro del género superheroico, una cómic que significó un gran homenaje al medio y la oportunidad de conocer a una gran parte de los superhéroes de Awesome Entertainment, la editorial de Rob Liefeld entre 1997 y 2000.
El concepto y lo que representa este cómic es una idea poco vista en el mundo del cómic. Es simple: un superhéroe es acusado de un asesinato y se hace un juicio. Pero el juicio no será normal sino que tanto el juez como los testigos y los abogados (de la acusación y la defensa) serán también superhéroes. Pero la historia no solo trata de este juicio sino que se planteará la conexión entre el asesinato y un extraño objeto milenario.
Trama
Knightsabre, miembro de los Youngbloods ha salido de fiesta por la noche y cuando vuelve se acuesta en la cama de su compañera de equipo, Riptide. Pero cuando despierta por la mañana descubre que ha sido asesinada y lo que es peor aún, todas las pruebas le señalan a él como asesino. Por ello es apresado y pronto se celebrará un enorme juicio que englobará a varios de los superhéroes más importantes de Awesome e Image Comics.
Un homenaje al legado de Alan Moore
No sólo estamos ante un homenaje profundo hacia el género de los superhéroes, sino también ante un autohomenaje a Watchmen. En Watchmen, Alan Moore nos había demostrado que los superhéroes (o vigilantes más bien...) podían también asesinar y en 'El día del juicio', publicado 10 años después de su obra maestra, en 1997, nos muestra que también puede caer sobre ellos todo el peso de la ley. El sello donde ocurrió este evento fue en Awesome Comics, un sello fundado por Rob Liefeld independiente de Image Comics, creado en 1996 después de que el autor se hubiera marchado de Image.
Rob Liefeld en Image Comics: Extreme Studios y Maximum Press (1992-1996)
En 1992 siete grandes artistas de Marvel decidieron hacer las maletas y crear su propia editorial. Los motivos fueron varios, pero destacaban dos: querían tener pleno control creativo sobre sus proyectos y además cobrar el copyright de sus creaciones. Estos siete artistas crearon sellos independientes totalmente suyos en Image: Todd McFarlane creó Todd McFarlane Productions, Marc Silvestri Top Cow Productions, Jim Lee Wildstorm Productions, Erik Larsen Highbrow Entertainment, Jim Valentino ShadowLine, y Rob Liefeld creó Extreme Studios.
Extreme Studios era uno de los sellos más brutales de Image, con mucha sangre, acción y violencia, y el dibujante dio rienda suelta a su imaginación (con algunos plagios) creando a los Youngblood, Badrock, Bloodstrike, Glory, Prophet, Supreme, Troll y los New Men, teniendo como referencia a los X-Force y el mundo mutante de Marvel (por ejemplo, Bloodstrike era muy parecido a Deadpool). Pero debido a la imagen tan violenta y extravagante de sus títulos, los editores de Image se enfrentaron a Rob Liefeld que decidió crear un sello totalmente independiente a Image Comics, Maximum Press, donde al principio creó títulos totalmente nuevos (Avengelyne, Warchild, Law and Order, Black Flag y Risk), hasta que al final trasladó a la mayoría de sus personajes cuando decidió salir de Image Comics (rodeado de mucha polémica) en 1996, creando a su vez un nuevo sello, Awesome Entertainment en 1997, en el que de nuevo trasladaría a sus personajes más emblemáticos. Por eso, si vemos la trayectoria editorial de Youngblood, Supreme o Prophet, entre otros títulos, vemos que han pertenecido a varios sellos... Es como si Spiderman pasa de pertenecer a Marvel a ser de DC y después pasa a Image Comics, por poner un ejemplo de lo más absurdo.
Awesome Entertainment (1997-2000)
La aventura de Liefeld en solitario sólo duró 3 años, de 1997 al 2000, año en el que se cerró la editorial por quiebra económica. Lo primero que hizo Liefeld al encontrarse con su propia editorial en solitario fue contratar al mejor guionista de todos los tiempos: Alan Moore, dándole total libertad creativa para que hiciera lo que quisiese con sus títulos. Entre sus trabajos más importantes destacó su reinvención de Supreme, donde el autor británico ganó el Premio Eisner en 1997 a Mejor guionista, y con este cómic, El día del juicio.
El día del juicio
Awesome Comics se hizo famosa y su autor Rob Liefeld por imitar y copiar conceptos de otros personajes ya creados, es decir, encontramos en el sello personajes parecidos a ya existentes. Supreme es una copia de Superman y Youngblood a Los Vengadores. Encima, en El día del Juicio vemos varias copias de otros personajes: Así, vemos a Zantar, el rey blanco del Congo, una imitación de Tarzán.
También vemos a Bramm, el Berserk, una copia de Conan, el Bárbaro, Arturo, Merlín y el Caballero de Invierno, homenajes a la historia del Caballero Negro de Marvel y muchos más.
Trama
Knightsabre, miembro de los Youngbloods ha salido de fiesta por la noche y cuando vuelve se acuesta en la cama de su compañera de equipo, Riptide. Pero cuando despierta por la mañana descubre que ha sido asesinada y lo que es peor aún, todas las pruebas le señalan a él como asesino. Por ello es apresado y pronto se celebrará un enorme juicio que englobará a varios de los superhéroes más importantes de Awesome e Image Comics.
Un homenaje al legado de Alan Moore
No sólo estamos ante un homenaje profundo hacia el género de los superhéroes, sino también ante un autohomenaje a Watchmen. En Watchmen, Alan Moore nos había demostrado que los superhéroes (o vigilantes más bien...) podían también asesinar y en 'El día del juicio', publicado 10 años después de su obra maestra, en 1997, nos muestra que también puede caer sobre ellos todo el peso de la ley. El sello donde ocurrió este evento fue en Awesome Comics, un sello fundado por Rob Liefeld independiente de Image Comics, creado en 1996 después de que el autor se hubiera marchado de Image.
Rob Liefeld en Image Comics: Extreme Studios y Maximum Press (1992-1996)
En 1992 siete grandes artistas de Marvel decidieron hacer las maletas y crear su propia editorial. Los motivos fueron varios, pero destacaban dos: querían tener pleno control creativo sobre sus proyectos y además cobrar el copyright de sus creaciones. Estos siete artistas crearon sellos independientes totalmente suyos en Image: Todd McFarlane creó Todd McFarlane Productions, Marc Silvestri Top Cow Productions, Jim Lee Wildstorm Productions, Erik Larsen Highbrow Entertainment, Jim Valentino ShadowLine, y Rob Liefeld creó Extreme Studios.
Extreme Studios era uno de los sellos más brutales de Image, con mucha sangre, acción y violencia, y el dibujante dio rienda suelta a su imaginación (con algunos plagios) creando a los Youngblood, Badrock, Bloodstrike, Glory, Prophet, Supreme, Troll y los New Men, teniendo como referencia a los X-Force y el mundo mutante de Marvel (por ejemplo, Bloodstrike era muy parecido a Deadpool). Pero debido a la imagen tan violenta y extravagante de sus títulos, los editores de Image se enfrentaron a Rob Liefeld que decidió crear un sello totalmente independiente a Image Comics, Maximum Press, donde al principio creó títulos totalmente nuevos (Avengelyne, Warchild, Law and Order, Black Flag y Risk), hasta que al final trasladó a la mayoría de sus personajes cuando decidió salir de Image Comics (rodeado de mucha polémica) en 1996, creando a su vez un nuevo sello, Awesome Entertainment en 1997, en el que de nuevo trasladaría a sus personajes más emblemáticos. Por eso, si vemos la trayectoria editorial de Youngblood, Supreme o Prophet, entre otros títulos, vemos que han pertenecido a varios sellos... Es como si Spiderman pasa de pertenecer a Marvel a ser de DC y después pasa a Image Comics, por poner un ejemplo de lo más absurdo.
¿A quién se parece Fighting American...?:
La aventura de Liefeld en solitario sólo duró 3 años, de 1997 al 2000, año en el que se cerró la editorial por quiebra económica. Lo primero que hizo Liefeld al encontrarse con su propia editorial en solitario fue contratar al mejor guionista de todos los tiempos: Alan Moore, dándole total libertad creativa para que hiciera lo que quisiese con sus títulos. Entre sus trabajos más importantes destacó su reinvención de Supreme, donde el autor británico ganó el Premio Eisner en 1997 a Mejor guionista, y con este cómic, El día del juicio.
El día del juicio
Awesome Comics se hizo famosa y su autor Rob Liefeld por imitar y copiar conceptos de otros personajes ya creados, es decir, encontramos en el sello personajes parecidos a ya existentes. Supreme es una copia de Superman y Youngblood a Los Vengadores. Encima, en El día del Juicio vemos varias copias de otros personajes: Así, vemos a Zantar, el rey blanco del Congo, una imitación de Tarzán.
También vemos a Bramm, el Berserk, una copia de Conan, el Bárbaro, Arturo, Merlín y el Caballero de Invierno, homenajes a la historia del Caballero Negro de Marvel y muchos más.
Pero obviando los homenajes y plagios, lo que consigue Alan Moore en esta historia de 4 capítulos es muy similar tanto a la idea de Watchmen como a la de Supreme: La historia del año (Aunque la trama está genial no está a la altura de estos dos títulos...), con flashbacks a hechos pasados que parece que no tienen conexión con el presente hasta que poco a poco se va resolviendo el caso. Se visitan la eras oscuras de los bárbaros en los años 400 D.C., el final del siglo XIX en la selva del Congo, el reino de Camelot o el Western americano... Cada capítulo va enganchando más y más un enredo que parecía demasiado confuso al principio. Moore aprovecha su retórica para transformar y reinventar muchos de los personajes de Awesome, además de, como hemos mencionado anteriormente, de crear interesantes copias de personajes míticos como Tarzán o Conan... ¡Un homenaje impresionante!
Rob Liefeld dibujando el cómic de Alan Moore
Desconcierta ver a Liefeld con su espectacular y exagerado dibujo no estar haciendo escenas de acción, de lo que prácticamente carece este cómic. Sí que hay violencia pero no es un cómic donde vemos palizas y mamporros, sino que es un cómic culto, muchas veces poético, lleno de cambios de tiempo y es totalmente un acto de veneración hacia el mundo de las novelas gráficas. De todos modos, los continuos flashbacks de la trama son dibujados por diferentes artistas del medio, todos ellos leyendas vivas del cómics: Gil Kane, Chris Sprouse, Jim Starlin, Rick Veitch, Steve Skroce y Steven Platt... ¡casi nada!
Supreme en El día del juicio
La aparición de Supreme es casi anecdótica, no demasiado relevante, pero es un inmenso placer verle dibujado por Liefeld, su creador. Aparece también Bartholomew J. Throll, otra creación de Liefeld y una copia en toda regla de Lobezno de los X-Men y Savage Dragon.
Supreme y Throll:
En conclusión...
Una obra divertida, culta, rompedora y un intenso homenaje al cómic. Quien pueda ver más allá de la copia barata que suponen algunos personajes descubrirá un mundo rico y repleto de conceptos nuevos y clásicos reinventados... Otra obra maestra de Moore.
Interior y portadas del cómic:
Una obra diferente de Alan Moore, pero llena de talento, momentos inesperados y un dibujo controvertido de Rob Liefeld y varios de los mejores dibujantes del medio: Gil Kane,Chris Sprouse, Jim Starlin, etc.
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