¡Una serie que debería poseer un gran tono policíaco y terrorífico!
Sam y Twitch son dos detectives que fueron creados en la serie regular de Spawn y aunque al principio eran un estupendos secundarios del título, rápidamente se ganaron el favor del público general y Todd McFarlane decidió que tuvieran su propia serie en solitario. Esto ocurrió en 1999, y protagonizaron varias miniseries que tenían un estilo oscurísimo de género negro mezclado con casos de corte demoníaco o místico, y siempre se alejaban del arquetipo superheroico.