Orbitador, de Warren Ellis

Una obra para redescubrir el espacio de nuevo, con Warren Ellis y Colleen Doran al mando de la nave.

ECC Ediciones publica Orbitador, una novela gráfica originalmente publicada en 2003 por Vertigo, el sello adulto de DC Comics.

El regreso a la tierra de un misterio espacial

Nos situamos a principios de siglo XXI. Las misiones tripuladas al espacio fueron canceladas hace más de diez años debido a los últimos accidentes ocurridos con los transbordadores espaciales. El último de ellos ocurrió cuando el transbordador espacial Venture desapareció de todos los radares poco después de haber despegado. Pero diez años después de su desaparición, la nave ha regresado a la tierra con sólo un tripulante, con intrumental y motores nuevos y algo que parece piel rodeando la capa exterior de la misma. ¿Dónde ha estado la nave todo este tiempo? ¿qué le ocurrió al resto de tripulantes? ¿y a la nave?

"Un cómic sobre la gloria, sobre volver al espacio porque nos está esperando y porque es allí donde debemos estar". - Warren Ellis

Orbitador es una obra de ciencia ficción dura (hard sciencie fiction). Este subgénero de la ciencia ficción concede una especial relevancia en la narración a los detalles técnicos y científicos. Por ello, las obras creadas bajo este subgénero suelen ser precisas, lógicas, rigurosas y, lo más importante, creíbles. Y Orbitador lo es. Algunas novelas famosas de esta subcategoría son la Saga de la Fundación de Isaac Asimov, Mundo Anillo de Larry Nive, la Trilogía de Marte (Marte rojo, Marte verde, Marte azul) de Kim Stanley Robinson o Cuarentena de Greg Egan, entre otros.

En el caso de Orbitador, la trama, a medida que va avanzando, va resultando cada vez más intrigante. Mientras más se estudia, tanto a la nave como el único tripulante vivo, se van planteando cada vez más preguntas relacionadas con la supervivencia de ambos durante toda una década en el espacio. Paradigmas relacionados con la física no paran de revolotear en la narración de forma elegante y sobre todo accesible para el público. Aunque la historia pretenda ser rigurosa y científica, la lectura es bastante ligera y entendible, dirigida claramente a un amplísimo espectro de la población. La idea de Warren Ellis era acercar la ciencia ficción al público general para enamorar, no para asustar con un montón de datos y conceptos ininteligibles. A ello se le suma el brillante arte gráfico de Colleen Doran, una de las autoras de cómic más importantes del panorama norteamericano de cómics. Ha dibujado cientos de cómics diferentes y ha trabajado con practicamente todos los grandes guionistas del medio, como por ejemplo: Alan Moore, Neil Gaiman, Anne Rice, J. Michael Straczynski o Peter David, entre otros, y ha sido galardonada con 4 Premios Eisner, 1 Premio Harvey, 1 International Horror Guild, 1 Premio Comics Buyer's Guide Fan y 1 Premio de la Asociación Americana de Librerías. Su arte es espléndido y lo demuestra con unas imágenes absorbentes y apabullantes. Los personajes son genialmente dibujados, pero destacan más sus imágenes panorámicas del transbordador espacial. Imágenes en las que vemos a la nave en diferentes puntos del espacio: entre otros planetas, aterrizando en la tierra, despegando, etc. Y a su gran dibujo se une el color que aporta Dave Stewart, el mejor colorista de la actualidad, ganador de 9 Premios Eisner a mejor colorista (en 2003, 2005, 2007–2011, 2013, y 2015).

Aunque haya tanto talento unido, para que el proyecto saliera bien hacía falta un ingrediente imprescindible a la hora de crear obras de calidad: la pasión. Y eso demostraron cada uno de los artistas para crear esta maravilla, esta trama que nos hace viajar a las estrellas de forma realista y nos hace soñar de nuevo con la conquista del espacio. Después de leer este cómic no volverás a mirar hacia las estrellas del mismo modo...

"Tu primer amor fue el espacio, Chelle. Y no lo olvidaste nunca. Yo no podía competir con el espacio. Todas las noches mirarías al cielo y te preguntarías por qué rompisteis".

Edición

ECC Ediciones ha publicado un tomo cartoné (tapa dura) que destaca por su gran belleza artística. Y además, al final de la historia, tenemos un epílogo escrito por Warren Ellis en el que nos explica sus motivaciones a la hora de escribir este cómic. Y para finalizar, nos encontramos con 4 páginas con bocetos de Colleen Doran. Echamos de menos más epílogos como el de este tomo, ya que nos muestran la perspectiva de los autores o de otras personas relacionadas con las obras.

En conclusión...

Un cómic diferente al resto. Pura ciencia ficción relatada en una historia misteriosa, intrigante y muy atractiva que te hará viajar hasta los confines del universo. Inspirador.

EQUIPO CREATIVO Y PUBLICACIÓN