"La realidad es a menudo mucho más compleja y emocionante que todas las historias de ficción, a menos que tengas un gran talento." - Savoia
Ponent Mon ha publicado una novela gráfica que se encuadra en tres géneros: el cómic histórico (está basado en hechos reales), el documental y el autobiográfico. Savoia, autor completo de la obra, nos transmite desde varias perspectivas, incluso la suya propia, la experiencia de un numeroso grupo de esclavos que naufragaron en una alejada isla del Océano Índico.
El mayor valor del cómic histórico reside en que, sea como fuere, la trama siempre tiene una base real que, cuanto menos, hace que la lectura sea mucho más eficiente provocando en el lector una mayor empatía con respecto a los protagonistas, y en el caso de 'Los esclavos olvidados de Tromelin', en una situación de tanta injusticia y dureza por la situación que tuvieron que vivir aquellas personas - y todos los que sufrieron la esclavitud de Europa por ser africanos -, convierten este drama en una obra realmente conmovedora y emocionante. Olvidados y perdidos en una diminuta isla del Océano Índico, a 500 km de cualquier orilla cercana, aquellos africanos vivieron una auténtica odisea de final realmente incierto, funesto y trágico...
Año 1761. Una nave de la Compañía francesa de las Indias naufraga en la pequeña isla de Tromelin, a 500 km de cualquier otro bastión de tierra. Dentro de la nave estaba la tripulación de franceses y poco más de un centenar de esclavos malgaches. Ya en el presente, Max Guérout, arqueólogo y exoficial de la Marina francesa, invita a Savoia (autor de esta novela gráfica) para que le acompañe a la isla y le ayude a encontrar restos de aquellos náufragos y así descubrir como se las arreglaron en aquella diminuta porción del mundo alejada de la mano de dios...
Trama
Año 1761. Una nave de la Compañía francesa de las Indias naufraga en la pequeña isla de Tromelin, a 500 km de cualquier otro bastión de tierra. Dentro de la nave estaba la tripulación de franceses y poco más de un centenar de esclavos malgaches. Ya en el presente, Max Guérout, arqueólogo y exoficial de la Marina francesa, invita a Savoia (autor de esta novela gráfica) para que le acompañe a la isla y le ayude a encontrar restos de aquellos náufragos y así descubrir como se las arreglaron en aquella diminuta porción del mundo alejada de la mano de dios...
Puntuación:
Publicación española: Septiembre de 2017 por Ponent Mon
Publicación original: Les ésclaves oubliés de Tromelin, publicado en 2015, por Dupuis
Autor completo: Savoia
Género: Documental, Histórico, Bande dessinée
Formato: Cartoné, 21'6 x 28'6 cm
Páginas: 120 páginas, Color
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"Creo que cada universo reclama un diseño diferente y no me gusta quedarme confinado a un estilo particular. Hay, sin embargo, dos estilos gráficos muy diferentes en Tromelin. Lo intento, trato de divertirme y especialmente aprender." - Savoia, entrevista a BDzoom
El orden de lectura de la novela va de la siguiente manera: cada cuatro páginas cambiamos de escenario, alternando la autobiografía de Savoia, con la historia de los esclavos, pero además de cambiar de historia, también se modifica el estilo de narración: en la historia autobiográfica no hay bocadillos sino reflexiones del autor, con una narrativa más densa, explicativa y detallista, describiendo cada situación por muy banal que pudiera parecer..., mientras que la narrativa de la historia de los esclavos es más directa, con más diálogos y narraciones en primera persona desde la perspectiva de la principal protagonista de la obra, una joven esclava, inteligente e intrépida, que vive un sinfín de situaciones, cada cual más intensa y curiosa. La parte de los esclavos es más trágica, más poética y muestra el trasfondo real de la obra: la injusticia social con respecto a los esclavos. El salvajismo y la tortura que debían padece los africanos por su color de piel...
"No quería centrar el guión en una personalidad (aunque lo hiciera un poco) sino en un evento, en un grupo completo. Estos son los temas que quería desarrollar. Muchas cosas me tocaron. Ya sea en Tromelin o Madagascar, o incluso en aquellas personas apasionadas con las que fui a realizar las excavaciones. Creo que el cuadro más fuerte que tengo de esto es el momento en que, cavando en el nivel de la tierra de ocupación esclava en el siglo XVIII, comenzamos a encontrar objetos que habían dejado atrás en el sitio. En una pequeña habitación hecha de bloques de coral, descubrimos utensilios de cocina almacenados unos en otros, cucharas alineadas, ganchos ... La última vez que alguien tocó estos objetos, fueron los supervivientes de Tromelin." - Savoia
Un aspecto que debemos de tener en cuenta es la maravilla visual que estamos presenciando. Los dibujos de Savoia son apabullantes a nivel visual, y a pesar de que estamos en una isla diminuta, Savoia se las arregla para mostrar desde muchas perspectivas la maravilla natural que representa el mar que lo rodea todo, los animales que la habitan, los diferentes cielos nocturnos, matutinos, atardeceres... además de realizar una caracterización genial de cada personaje, con una gran predilección por las emociones y los gestos de cada uno de ellos, sin heroizar a ninguno de ellos. No hay buenos y malos, no hay héroes o villanos, sólo hay sentimientos, desesperanza, miedo, terror, soledad, abandono... frío y muerte. Esto es lo que vivió gente de verdad, personas que tenían el color de piel que determinaba que no eran nada en aquella época, o menos que nada, sólo una ganancia para algunos, mientras los dioses les daban la espalda (o eso creían ellos...). Y todo esto se refleja en cada uno de los personajes reales de la historia, personas que nunca pidieron estar en un cómic y mucho menos en aquella inhóspita isla del vasto mar índico.
Sylvain Savoia comenzó a dibujar muy temprano y ya a finales de los años ochenta realizó varios dibujos para diferentes fanzines. No sería hasta 1993 cuando crearía su primer álbum, Reflets perdus. Sólo un año después, en 1994, abriría su propio estudio de edición, Estudio 510 TTC, para mantener el control de parte de su carrera artística. Comenzando el siglo XXI, en 2003 publicaría Al'Togo para la editorial Dargaud, y un año después la exitosa Marzi, una obra autobiográfica basada en su niñez y adolescencia en Polonia. Ya, en 2015, publicaría Les ésclaves oubliés de Tromelin (Los esclavos olvidados de Tromelin), uno de sus trabajos más reconocidos a nivel nacional.
Como siempre, Ponent Mon nos tiene acostumbrados a ediciones de auténtico lujo, cartoné, con papel de alta calidad y traducciones perfectas... ¡con unos extras geniales que nos explican el proceso creativo del autor, curiosidades y todo tipo de detalles! Normalmente, las obras de esta editorial son experiencias reales de aprendizaje sobre el mundo, de historia y de hechos realmente fascinantes. Esto es cultura.
Una novela gráfica que ejemplifica las mejores virtudes del género documental, histórico y autobiográfico, profundamente real, trágica y conmovedora. Se respira humanidad en cada viñeta, naturaleza y mar.
Savoia
Sylvain Savoia comenzó a dibujar muy temprano y ya a finales de los años ochenta realizó varios dibujos para diferentes fanzines. No sería hasta 1993 cuando crearía su primer álbum, Reflets perdus. Sólo un año después, en 1994, abriría su propio estudio de edición, Estudio 510 TTC, para mantener el control de parte de su carrera artística. Comenzando el siglo XXI, en 2003 publicaría Al'Togo para la editorial Dargaud, y un año después la exitosa Marzi, una obra autobiográfica basada en su niñez y adolescencia en Polonia. Ya, en 2015, publicaría Les ésclaves oubliés de Tromelin (Los esclavos olvidados de Tromelin), uno de sus trabajos más reconocidos a nivel nacional.
Edición
Como siempre, Ponent Mon nos tiene acostumbrados a ediciones de auténtico lujo, cartoné, con papel de alta calidad y traducciones perfectas... ¡con unos extras geniales que nos explican el proceso creativo del autor, curiosidades y todo tipo de detalles! Normalmente, las obras de esta editorial son experiencias reales de aprendizaje sobre el mundo, de historia y de hechos realmente fascinantes. Esto es cultura.
En conclusión...
Una novela gráfica que ejemplifica las mejores virtudes del género documental, histórico y autobiográfico, profundamente real, trágica y conmovedora. Se respira humanidad en cada viñeta, naturaleza y mar.
Una obra maravillosa, triste, bella, emocionante y muy real.
Otros títulos de género histórico:
Que impactante y trágica historia vivieron las personas en Tromelin. me conmueve solo imaginar la angustia y el desespero que deben haber sentido.
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